En época de calçotades lo más normal es que, en un momento dado, tengamos un “súperhàbit” de calçots. Una vez cocinados, una muy buena manera de aprovecharlos, es haciendo canelones de calçots.

Ingredientes para 2 personas

  • 9 a 12 calçots
  • 8 placas de canelones
  • 3 cucharadas soperas de salsa romescu
  • Queso rallado

Para la bechamel:

  • 40 ml de aceite de oliva virgen extra
  • 1 cucharada sopera de harina
  • 300 ml de leche
  • 2 cucharadas soperas de salsa romescu (no muy grandes)
  • Sal y pimienta

Elaboración

Tenemos los calçots cocinados a fuego, y las placas de canelón hervidas y preparadas; a partir de aquí troceamos los calçots y los mezclamos con la salsa romescu, añadimos esta mezcla al canelón y lo enrollamos. Vamos situando los canelones uno al lado del otro sobre un trapo de cocina o una superfície limpia, donde no se puedan quedar pegados.

Para la bechamel, calentamos el aceite de oliva, mezclamos con la harina, y mezclamos bien, para que todo quede integrado; a partir de aquí, vamos añadiendo la leche a temperatura ambiente o ligeramente caliente, sin parar de mover y hasta que obtengamos la textura adecuada; añadimos la sal y la pimienta; luego añadimos la salsa romescu, y mezclamos de nuevo. Probamos la bechamel que esté a nuestro gusto.

Untamos la bandeja con mantequilla o aceite de oliva, y añadimos una fina capa de bechamel; vamos situando los canelones bien juntos, y encima añadimos otra capa de bechamel y el queso rallado.

Horneamos a 180 – 200ºC unos 15 – 20 minutos, procurando que no se quemen ni de arriba ni de abajo.

Fotografía: Jordi Sarola